El Nuevo Diseño del Gravamen a la Banca: ¿Cómo afectará a los Grandes Bancos como CaixaBank, BBVA y Santander?
La reciente reforma fiscal en España ha introducido un nuevo diseño de gravamen para el sector bancario. Este cambio ha generado un sinfín de especulaciones y debates sobre cómo afectará a las entidades financieras más grandes del país, como CaixaBank, BBVA y Santander.
Entendiendo el Nuevo Gravamen a la Banca
El Congreso ha aprobado una reforma fiscal que incluye un nuevo diseño del gravamen a la banca. Este gravamen, que inicialmente tendrá una duración de tres años, será progresivo, y se aplicará en función de los márgenes de intereses y comisiones de cada entidad. Los tipos impositivos oscilarán entre el 1% para los ingresos hasta 750 millones de euros, y llegarán hasta un 7% para las entidades cuyos ingresos superen los 5.000 millones de euros. Además, se incluye una deducción «extraordinaria» para aquellas entidades que reduzcan su rentabilidad por activos por debajo del 0,7%.
¿Cómo afectará a los Grandes Bancos?
Según las cifras disponibles, CaixaBank, BBVA y Santander se encontrarán en el rango del 7% al registrar ingresos por encima de los 5.000 millones de euros. Por su parte, Sabadell estaría gravado por un tipo del 6% mientras que Bankinter y Unicaja estarían en el rango del 4,8%.
Posibles Acciones Legales: ¿Qué dicen los Bancos?
Ante esta nueva situación, algunas entidades ya han mostrado su desacuerdo. Santander y Unicaja, han anunciado que recurrirán el nuevo diseño del impuesto, como ya hicieron con el anterior gravamen. Por otro lado, entidades como CaixaBank, BBVA y Sabadell aún no se han pronunciado al respecto.
¿Es inconstitucional el Nuevo Gravamen a la Banca?
Según fuentes del sector, existe la creencia de que este nuevo gravamen podría ser considerado inconstitucional. Argumentan que el nuevo diseño no cumple con los principios de la Ley General Tributaria para los impuestos, en especial el principio de capacidad económica, recogido en el artículo 31 de la Constitución.
Defensa del Sector Bancario
Las patronales AEB y CECA han rechazado «frontalmente» la inclusión del nuevo gravamen. Argumentan que el impuesto tendrá graves efectos para la financiación de familias y empresas y la inversión, en un contexto de riesgos geopolíticos y con fuertes necesidades de financiación. Aseguran que la medida restará 50.000 millones de nueva financiación a familias y empresas.
El Impacto sobre la Competitividad
Los bancos defienden que este impuesto carece de parangón en los países de la Unión Europea, lo que perjudicaría la competitividad de las entidades de crédito españolas y la economía general. Además, critican que la medida supone una fragmentación del mercado interior por su diferente aplicación entre comunidades autónomas y señalan que se produce un «señalamiento» de un sector cuyo objetivo es trabajar por el crecimiento económico y el progreso social.
El camino hacia la aplicación de este nuevo gravamen aún no está claro y habrá que ver cómo se desarrollan los próximos movimientos de las entidades afectadas, así como los efectos reales que tendrá esta medida en el sector bancario y en la economía española en general.


